Nos pasaba a muchos niños, pero no a todos. Cerrabas los ojos por la noche y entonces la cama y el cuarto comenzaban a hacerse muy muy grandes, mientras que tú te quedabas pequeño. Y poco a poco te dormías.
Cuando te haces mayor, te deja de suceder. Para ser un poco más exactos, digamos que ese sentimiento se transforma. Ahora, por las mañanas, experimentas una sensación de que el Mundo se te queda grande y que tú eres muy pequeño. Y con esa sensación no te queda otra que salir a la calle y confiar en ir creciendo por el camino.
30 de marzo de 2007
Hoy el Mundo y yo
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emilio, esa foto despierta mi instinto maternal... dan ganas de cogerte en bracitos y decirte que vas a comerte el mundo con papas!!
un besito*
pues no tengo ni idea ke virgen puede ser jejejeje
besossss
a mi me saba eso!!!! pero yo no me podía dormir, cerraba los ojos y me parecía tener el infinito delante de mi y como si a cada momento me apretase más y más la oscuridad de aquello tan inmenso, tan "infinito" y tenía que abrir los ojos. No me gustaba nada, casi tan poco como cuando soñaba con la nieve de la tele, cuando se pone como codificada con puntitos blancos y negros.
Tu que sabes tanto ¿de que es?