29 de marzo de 2009

Galactica 4x20


Para no hacer ningún tipo de spoiler, sólo comentaré que el último capítulo de la serie me ha parecido aburrido, pasteloso e inconsistente, y que deja demasiadas preguntas sin contestar.

Nunca me han gustado los finales abiertos.

Foto: Yo con uniforme civil, entre la tripulación de la nave Galactica.

26 de marzo de 2009

Títulos (2)


Una nueva obra de mi grupo de teatro está a punto de ser estrenada; y por lo tanto, hemos sufrido de nuevo un "Día del título", en el tuvimos que decidir cómo llamar a nuestra obra para que ésta tuviera "gancho".

Luis propuso llamar a la nueva obra "Meta-obra en un cajón". La propuesta no era mala, pero nos parecía un poco repipi y la fuimos transformando: "Metí la obra en un cajón", "La metí en un cajón", "Métemela en el cajón",... ...y así todo un conjunto de nombres formados con las posibilidades más sugerentes del verbo meter.

Al final, la hemos acabado llamando "Simón muy muy Verde", que aunque no tiene nada que ver ni con cajones ni con metimientos, es un título gracioso.

Foto: Cartel promocional de "Simón muy muy Verde".

18 de marzo de 2009

Genéricos: cuando no todo es bonito


Hoy os expongo tres situaciones reales en las cuales no tengo claro si debo prescribir formas genéricas o comerciales.

1º Un principio activo tiene dos formas comerciales: una es genérica y la otra, comercial. Curiosamente, la forma comercial es más barata que la genérica. ¿Cuál de las dos formas debe prescribirse?

2º Un principio activo tiene una sola forma farmacéutica que no genérica. ¿Deben tenerse en cuenta los derechos de copyright de la compañía farmacéutica sobre el fármaco y recetarse por su nombre comercial o bien ignorarlos y prescribirlos por principio activo, sabiendo que se haga lo que se haga en la farmacia van a entregar el mismo medicamento?

3º Un paciente es alérgico a un excipiente de la forma genérica de un medicamento que no está presente en la forma comercial. ¿Se debe prescribir la forma comercial o bien un genérico especificando en la receta que éste no puede contener el excipiente alérgeno?

A ver si me podéis solucionar las dudas...

14 de marzo de 2009

El síndrome del Rottweiler


El síndrome del Rottweiler es un pensamiento vacío y absurdo que de vez en cuando nos entra a algunos jóvenes del siglo XXI.

Consiste en pensar que nunca vas a encontrar pareja y que acabarás de por vida viviendo sólo en un apartamento. Para no sentirte solo, te comprarás un Rottweiler para que te haga compañía. Pero un día te morirás solo en tu apartamento. Al principio, el Rottweiler llorará tu pérdida; hasta que le entre hambre. Cuando esto ocurra, te devorará y te dejará en los huesos.

Hace años le conté este síndrome inventado por mí mismo a Maribel y se rió: no le parecía nada verosímil. Me dijo que todo el mundo tiene una pareja por ahí esperando a ser encontrada. Maribel se rió de sí misma cuando ella no tenía novio. Meses después, encontró a un tío genial y se casará en unas horas.

Por eso, en esta vida hay que olvidarse de las obsesiones tontas y reírse siempre de uno mismo.

Foto: Un ensayo de una obra de teatro hace unos años. Maribel practica su número de violín en un cuarto de baño del Hospital Macarena.

11 de marzo de 2009

1:30 AM: Odio el polen


¿Cómo pueden acumularse en una semana tanto trabajo en el hospital, tanto trabajo de investigación, un curso inútil de formación de cuatro horas todas las tardes y ensayos de teatro diarios?

¿Y por qué precisamente esta semana los niveles de polen tenían que estar tan jodidamente altos? Es la una y media de la mañana, tengo la cabeza llena de moco y no puedo dormir.

Foto: Un ensayo. Yo no salgo; estaba por ahí estornudando compulsivamente.

7 de marzo de 2009

Fumar en el hospital


Dentro del hospital no está permitido fumar; pero es sabido por todos que se fuma. En el tiempo que llevo en el hospital, he visto a médicos adjuntos, médicos residentes, enfermeros, auxiliares, celadores, pacientes y familiares de pacientes hacerlo.

Me parece mal, pero no sé qué actitud tomar al respecto. Podría recordar a las personas a las que pillo fumando cuando paso a su lado que no se puede fumar en el hospital; sin embargo, con esa actitud sólo conseguiría que retrasaran su cigarrito dos o tres minutos, el tiempo que yo tardara en desaparecer.

La otra posibilidad es no hacer nada, no decirles nada, verles fumar y consentir. Cada vez que hago esto último me siento bastante mal; me convierto en una "bata blanca tolerante" para los fumadores y me doy asco. En esos momentos, sé que acabo de tolerar algo realmente dañino para mis pacientes, que se encuentran a escasos metros, y a los que he ingresado porque están medio asfixiados y les cuesta mucho trabajo respirar.

¿Qué debería hacer? ¿Alguna sugerencia?

Foto: Una de las muchas colillas en uno de los muchos descansillos de las escaleras.


4 de marzo de 2009

Sillas imperfectas


-¿Y ahora qué? ¿Tengo derecho a estar enfadado contigo? -me preguntó un médico adjunto.
- -respondí.

Tenía motivos para estarlo. Yo había tomado una decisión con un paciente suyo que no había sido la más acertada. La decisión que yo había tomado no era mala; no lo hice mal. Pero la verdad es que podía haberlo hecho mucho mejor.

Hubo un momento de silencio tenso. Creía que el adjunto me iba a reñir o a gritar. Pero no fue así. Simplemente siguió hablando calmadamente.

-Sí, te has equivocado. Pero no pasa nada.

Me miró y yo comprendí su mirada. Era una mirada agradable. Con ella quería decir "sé que ahora mismo te está dando mucha rabia el no haber estado a la altura y que yo, que no soy médico de tu especialidad, haya acabado teniendo razón".

-Yo también me he equivocado una primera, una segunda y una tercera vez. Todos nos equivocamos cuando empezamos. Y muchas veces aprendemos así, porque nos equivocamos con un paciente. Es necesario pasar por ahí.

No me esperaba para nada que fuera a decirme eso.

-Es como un carpintero que fabrica sillas -continuó. La primera silla que haga seguramente servirá para sentarse, pero tendrá muchos defectos. Intentando mejorarlos, construirá una silla mejor. Si se fija en los defectos de esta segunda silla, seguramente la tercera que haga será todavía mejor. Y así, mientras que tenga ganas de aprender de sus errores, conseguirá una silla cada vez más perfecta.

Yo lo escuchaba atentamente, como si llevara meses esperando a que alguien me dijera precisamente eso.

-Hay médicos que no quieren aprender de sus errores. Pero otros sí. Y si lo haces, llegará un día en que las sillas que fabriques serán reconocidas por mucha gente.

En cuanto hubo acabado, me entraron ganas de abrazarle. En serio.

Foto: Inconfundible silla fabricada por Ikea.

1 de marzo de 2009

Primeros problemas con la vacuna del VPH


Los profesionales sanitarios se lo estábamos advirtiendo al Ministerio: que con el sistema inmune no se juega, que las vacunas no son tan inofensivas como la gente se piensa. Concretamente, yo ya lo escribí por aquí el pasado agosto y lo vuelvo a escribir ahora.

La situación actual acerca del cáncer de cuello de útero no es tan grave como para tener que vacunar a todas las niñas vírgenes de 14 años; especialmente si se hace con una vacuna cuyos efectos secundarios son poco conocidos.

En Valencia, dos niñas han tenido que ser ingresadas en la UCI por cuadros convulsivos tras habérseles administrado la vacuna del papiloma. Parece que es un efecto secundario extraordinariamente raro, pero que seguro que no hace nada de gracia cuando eres la familia de una pobre chica a la que le ha tocado la papeleta.

Espero que no se produzcan efectos secundarios graves a medio y largo plazo, porque estos efectos nunca han sido estudiados en humanos y por tanto no tenemos ni idea de lo que puede llegar a pasar.

Foto: Yo y dos linfocitos B: esos glóbulos blancos encargados de producir los anticuerpos.